Feelings...

...nothing more than feelings...

Hay quien piensa que el mundo lo mueve el dinero. De hecho, yo he estado convencido de ello más de una vez. Pero últimamente me he dado cuenta de que no, de que lo que realmente mueve el mundo son los sentimientos. Y esto, que por una parte hace lo convierte en un sitio mucho más irracional y complejo para vivir, por otra debería conseguir hacernos sentir un poco más vivos, y no unas máquinas de producir.

Las dos últimas semnanas he estado de tour por España (BCN-León-Salamanca-Madrid-BCN), y ahora descanso un poco en mi querida ciudad natal antes de volar a Copenhague por última vez, al menos como Erasmus. Y en este viaje he actuado casi como un naturalista, observando sentimientos bajo mi atenta lupa.

Sentimientos como el amor inocente en los ojos de una pareja de adolescentes que no pueden estar juntos sin discutir pero no sabrían vivir el uno sin el otro. Como el odio y el rechazo de alguien a un ser querido como reacción al daño autoinflingido. Como la amistad con toda esa gente que me ha demostrado que vale la pena y no me fallarán, la camaradería repartida entre vodkas y algún anís Machaquito. Como la mirada de sacrificio incondicional de una madre por su hijo/a, la niña de sus ojos. Como la ingenuidad de una mirada sincera cuando habla de viejos propósitos para un año nuevo. Como mi admiración en la conversación con alguien tan culto como "la Lady", o mi cariño hacia todos aquellos que vi estas vacaciones y hacía demasiado que no abrazaba. Como la morriña por ver a aquellos que no pude incluir en la ruta (esos maños...). Como el deseo apenas reprimido en los ojos de un hada comprometida, o los celos (justificados) de quien pretende atar en corto a esa personita alada. Como la ilusión y el miedo atroz a que ésta se troque en dolor insoportable, mietnras pienso en ver por primera vez a alguien que no me es nada desconocido...

Así que gracias a todos los que, voluntariamente o no, me habéis ayudado a observar todas esas cosas y a decidir que, gracias a todo esto, el mundo es un lugar donde vale la pena vivir. Creo que ahora me falta atrever a vivirlo del todo, pero eso será más bien cuestión de meses. Y es que lo de "la fortuna favorece a los valientes", o "sin riesgo no hay victoria", es más fácil pensarlo (o decirlo) que creérselo y aplicarlo. Pero todo se andará.

Más noticias, para cuando llegue a Copenhague. Un abrazo navideño para todos.

PD: por cierto, que aunque no actualizara no he dejado de escribir. Alguien me encargó un texto sobre Barcelona y me siento bastante orgulloso del resultado... podéis leerlo como opinión en Ciao aquí